El nuevo plan prevé acciones como el establecimiento de zonas de bajas emisiones (ZBE) antes de 2023, medidas para facilitar los desplazamientos asociadas a modos de hábito saludables, mejora del uso de la red de transporte público o impulso de la movilidad eléctrica, entre otras.
Para llevarlo a cabo se cuenta con una Estrategia de Desarrollo Urbano Sostenible e Integrado (Edusi), uno de cuyos objetivos temáticos aborda intervenciones para favorecer el paso a una economía de bajo nivel de emisión de carbono por más de 2,5 millones de euros y, concretamente, algo más de 1,1 millones de euros destinados al fomento de la movilidad urbana sostenible, incluyendo los PMUS.